Max Patté
BRITÁNICO, 1977
La práctica de Max Patté es, en esencia, una exploración de las infinitas cualidades de la luz y cómo se expresa en el mundo natural que se manifiesta en trabajos físicos en el estudio utilizando las tecnologías disponibles para él. Los avances en las tecnologías modernas son una fuente constante de inspiración para la producción de la obra de Patté. En su estudio se emplean diariamente los últimos avances en una variedad de software, aplicaciones para iPad, fresado CNC, escaneo digital e impresión 3D.
La luz, el color, el tono, la saturación y la calidez tienen un efecto directo en nuestro estado de ánimo, cambiando nuestras emociones tanto como nuestro entorno. A través del uso del color y la luz, la práctica de Patté, que abarca obras de luz, pintura y escultura, se esfuerza por emitir el mismo efecto. Patté pretende cambiar el espacio en el que se ve la obra y alterar la relación del espectador con ese espacio. De la misma manera que nuestro entorno natural inmediato provoca un cambio fisiológico, Patté pretende producir obras que ofrezcan una experiencia multisensorial que provoque una respuesta emocional.