Jaime Monge
ESPAÑOL, 1990
Las pinturas del artista reflejan principios de diseño arquitectónico como la proporcionalidad, la estabilidad y la simplicidad, derivados de su experiencia como arquitecto. Estos elementos sirven como base para expresar sus ideas creativas.
Habiendo perfeccionado sus habilidades como arquitecto, el artista desarrolló un agudo sentido de comprensión de los sentimientos y deseos de las personas, no sólo dentro de los límites de los espacios físicos sino también en el contexto más amplio de las experiencias de la vida. Su trabajo se convierte en un medio para articular estas emociones, experiencias y recuerdos desde una perspectiva única.
A pesar de los fuertes fundamentos arquitectónicos, la visión 3D (axonométrica) del artista renuncia al dominio de la arquitectura, permitiendo a los individuos definir el paisaje por sí mismos, ofreciendo así una experiencia más personalizada e inmersiva.